El management y cómo ser un buen manager me enganchó tras haber sido lanzado a ese rol hace ya algunos años. Me faltaba mucha preparación y tenía que aprender rápidamente. Y empecé a disfrutar ayudando a un grupo de personas a trabajar juntas en equipo, como un equipo de verdad, y producir mucho más que la suma de sus contribuciones individuales.

Mi paso al rol de management también coincidió con el desapego que mis padres tenían de sus trabajos. Pude ver bien de cerca lo que malas prácticas de management pueden hacer a las personas, incluso con buenas intenciones y quería ayudar a descubrir alternativas que nuestra sociedad nos ha enseñado y que promueve. Esos diferentes estilos de management pueden conseguir grandes resultados para las organizaciones y, más importante aún, para las personas que trabajan allí.

Siempre me he considerado "orientado a personas" y disfruto todo tipo de actividades creativas como dibujar o tocar instrumentos musicales, lo que explica por qué el elegir IT como carrera profesional allá por los años 90, no fue más que una decisión práctica, aunque también una decisión de la que nunca me arrepentiré.

Después de pasar mucho tiempo escribiendo código razonablemente bien, decidí empezar a orientar mi carrera hacia funciones de "management" y fue cuando Agile se cruzó en mi camino (allá por 2010). Ese momento cambió la manera en la que veía las cosas, encontrando el "sentido común" en el trabajo de IT. Desde entonces no he dejado de aplicar ese "sentido común" para aprender, crecer, ayudar y liderar en todo tipo de entornos, tanto técnicos como no técnicos.

Ahora mi objetivo es ayudar a las personas, equipos y organizaciones a encontrar ese "sentido común" compartiendo lo que he aprendido y acompañándolos en este camino, mientras yo mismo continúo creciendo de esas experiencias.